2.14.2006

Reacción débil del gobierno mexicano.

Editorial.

El nuevo muro de Berlín como le llaman muchos, ha cobrado una nueva víctima; no la de un terrorista, ni narcotraficante o la de un miembro de Al Qaeda sino la de un mexicano en busca de trabajo, su delito para los hombres del imperio es ser pobre.

La muerte de Guillermo Martínez es una evidencia más de la política de criminalización del gobierno de Estados Unidos hacia nuestros connacionales. Con tan sólo 18 años Guillermo buscaba mejores condiciones de vida para su familia y encontró la muerte al cruzar el nuevo muro de Berlín auspiciado por la administración de Bush.

El gobierno Mexicano no ha reaccionado como se espera en estos casos debido a su política exterior servilista hacia Estados Unidos y además la sociedad en general todavía no se ha manifestado como debieran frente a este crimen, al parecer nos estamos acostumbrando a este tipo de prácticas. Mientras tanto el congreso estadounidense acaba de aprobar la “Border Protection, Antiterrorism and Illegal Immmigration Control Act 2005”(HR4437) que se envió al senado para su debate. Esta ley criminaliza la migración, la convierte en un delito federal.

Hasta cuando se va a permitir esto, es momento de reaccionar y darnos cuenta de la fuerza que podemos ejercer. México es el tercer consumidor de productos Estadounidenses en el mundo, además somos su principal fuente de mano de obra barata, la que aporta una gran riqueza a su poder económico y hegemonía, no debemos olvidarlo.

El "dato" encerrado en la Coca-Cola




Gregorio J. Pérez Almeida
Tomado de Rebelion.org

Evo Morales ha dicho muchas cosas que queríamos escuchar hace más de quinientos años por la boca de un presidente boliviano. Ha dicho también cosas que se escucharon con sordina por siglos en América Latina y ha dicho cosas que revelan, por fin y ante el mundo, una de las causas de la obstinada presencia yanki en territorio andino y especialmente boliviano: el control de la Coca a través de su empresa Coca Cola.

Con su parsimonia ancestral, Evo reclamó ante la prensa internacional el trato especial que le dan los gobiernos andinos a la comercialización de la hoja de coca que "compra" la Coca-Cola Internacional, empresa emblemática no sólo del Imperialismo yanki, sino de algo más profundo y eficaz en la dominación cultural que ejerce sobre gran parte del mundo: el "modo de vida estadounidense"(¿Verdad que no hay mejor combinación que una hamburguesa o un "hot dog" con todo y una Coca Cola bien fría?) Dijo Evo que el comercio de dicha hoja está ilegalizado entre los países andinos pero no para la empresa gringa, es decir que entre los ciudadanos y las empresas andinas no se puede comercializar libremente la hoja de coca, pero la Coca Cola sí puede comprar la cantidad que quiera en cualquier país andino que la produzca.

Más allá del dato frío y de la conclusión inmediata que se deriva de su primer análisis, podemos adelantar algunas otras hipótesis que nos llevan a dibujar otro esquema en la comprensión de la drogadicción y el narcotráfico internacional. Con tan sólo introducir en el esquema vigente el dato que estaba oculto y que nos reveló Evo Morales se abren nuevas interrogantes, surgen nuevas sospechas y cobran mayor relevancia algunos hechos pasados por "debajo de la mesa" de los especialistas internacionales en narcotráfico.

Primer interrogante: ¿En verdad se utiliza hoja de coca en la fabricación de la Coca Cola? Esta no es una pregunta retórica o desinformada sino que constituye un punto de inflexión obligatoria en el estudio del caso, porque en el año 2002 la misma empresa negó el uso de la hoja de coca en la fabricación del producto, tal como comprobamos al leer el artículo de Luís A. Gómez publicado en http://www.rebelión.org/, el 27 de noviembre de ese año. En el leemos:"Hace unos días, el Viceministro de Defensa Social de Bolivia, Ernesto Justiniano, informó que su oficina había autorizado la exportación de 350 mil libras (aproximadamente 150 toneladas) de hoja de coca a Estados Unidos "para la fabricación de la gaseosa Coca-Cola"[.] El hecho fue negado por una vocera de la empresa estadounidense, consultada por el diario mexicano El Universal el martes pasado: Karyn Dest, vocera de Coca Cola, dijo vía telefónica desde Atlanta que la empresa no utiliza cocaína y que nunca ha sido parte de los ingredientes de la bebida" (Esta respuesta fue repetida en diciembre de 2002 por la representante de la trasnacional en México, Adriana Valladares).

Sorprendente esta respuesta que acaba con un mito moderno: la Coca Cola no contiene coca y mucho menos cocaína, pero. ¿Quién habló de "cocaína" en la Coca Cola? Nadie. Era una creencia, un mito ¿o un gancho publicitario? Pero de lo que sí se habló fue de las hojas de coca que compra por montones la trasnacional y la vocera lo evadió ¿o fue un Lapsus linguae? Buena vocera. ¿Interesante verdad? Pero más interesante se hace el asunto cuando seguimos leyendo en el artículo de Gómez y encontramos que: "También se ha hecho público que el trabajo de Albo Export, una empresa propiedad del boliviano Fernando Alborta, ha exportado coca desde Perú y Bolivia los últimos años, y que entre 1997 y 1999 envió a Estados Unidos un equivalente a 340 toneladas de hoja. Estas operaciones de compra y procesamiento son severamente vigiladas, en Bolivia por la Dirección General de Control y Fiscalización de la Hoja de Coca (Digeco) y en Estados Unidos, claro que sí, por la DEA, que incluso provee los almacenes con sofisticados sistemas de alarma y los cofres especiales para guardar en New Yersey el curioso tesoro natural.”

Pero esto no es todo en las contradicciones entre los expendedores "naturales" y sus "mejores clientes", porque en el año 2004, el zar antidrogas de Perú, Nils Ericsson, en un escrito publicado el 26 de enero, afirmó que: "La Coca Cola, la mundialmente conocida fábrica de bebidas gaseosas, compra al Perú 115 toneladas de hoja de coca al año y a Bolivia 105 toneladas con las cuales produce, sin alcaloides, 500 millones de botellas de gaseosas al día" (Luís Gómez, The Narco Bulletin, 28 de enero de 2005, en http://www.narconews.com/), lo que hace pensar al articulista Gómez que la presión por erradicar la coca en Perú (y completamos nosotros: en todos los países andinos productores) es una estrategia para asegurar a Coca Cola el monopolio de la hoja de coca, no sólo con la intención de controlar ese mercado sino también para monopolizar el mercado de refrescos que utilizan hoja de coca ¿sin alcaloides? cuya fabricación está floreciente en Perú bajo las marcas Vortex Coca Energy y K-Drink.

Luego de leer todos los argumentos que rodean nuestra primera interrogante, una posible respuesta es la siguiente: Si la Coca Cola Internacional es la primera empresa multinacional (monopólica) en la comercialización de la hoja de coca, materia prima esencial de la Cocaína, para lo que se ha valido de su estatus legal privilegiado en los países andinos, y sus voceros se niegan a reconocer la utilización de hoja de coca en la fabricación de la bebida, entonces esta empresa debe ser el primer sospechoso en la investigación de las redes mundiales del narcotráfico porque ¿Qué hacen con todas esas toneladas de hojas de coca que compran anualmente?

Más allá o más acá de las preguntas y respuestas, que pueden multiplicarse por cien, vayamos por un instante a la realidad inmediata: tomemos en nuestra mano una botella de Coca Cola de 600 ml hecha en Venezuela y leamos lo que está escrito en la etiqueta luego de la identificación de la empresa productora:"INGREDIENTES: AGUA CARBONATADA, AZÚCAR, CARAMELO, ÁCIDO FOSFÓRICO, EXTRACTOS VEGETALES Y CAFEÍNA”

¿Encuentra usted, amigo lector, alguna información que nos advierta la utilización de algún derivado de la hoja de coca? Cuando mucho nos pueden querer convencer con la enigmática expresión "EXTRACTOS VEGETALES", pero ¿de cuáles vegetales se trata y qué se les "extrae" a esos vegetales?, porque si se trata de la hoja de coca que contiene varios alcaloides, ¿cuáles desechan y cuáles dejan en la gaseosa? Y si la empresa reconociera que utiliza la hoja de coca y dice que elimina todos los alcaloides ¿qué sustancia queda? La verdad es que en vista de la contradicción evidente entre la acción de la empresa que compra toneladas de hoja de coca en Bolivia, en Colombia y Perú y el empeño de sus voceros en negar la utilización de hoja de coca en la fabricación de la bebida, lo menos que podemos hacer es demandarla por oferta engañosa. ¿Será posible que los ciudadanos de los países andinos donde se vende la Coca Cola, introduzcan una demanda (los especialistas dirían en cuál organismo y a qué nivel) por la vía de los intereses difusos? Fracasada o exitosa sería esta una experiencia extraordinaria de pedagogía política y de integración popular.

Otras interrogantes han estado en nuestra mente desde hace muchos años como misterios que nadie se ha atrevido a desentrañar porque están "protegidos" por normas internacionales de industria y comercio, pero hoy, gracias a los "cocaleros" andinos como Evo Morales y a investigadores como Luís Gómez, ya sabemos que la gaseosa más vendida en el mundo contiene en su fórmula algún derivado de la hoja de coca y si la empresa no lo reconoce entonces debe explicarle al mundo qué hace con tanta hoja de coca en sus depósitos de Atlanta. Algunas de esas otras interrogantes son: ¿Qué derivado, o derivados, de la hoja de coca es el que utilizan para elaborar la base de la Coca Cola y qué relación tiene (n) con la Cocaína? ¿Ese derivado genera adicción en los consumidores o crea en ellos las condiciones fisiológicas para propiciar algún tipo de adicción? Y si la hoja de coca diluida en la Coca Cola no genera adicción, entonces ¿por qué tanta alharaca (léase represión, persecución y muerte) con su cultivo, procesamiento y comercialización en los países andinos?

Mal año para la cultura local


Por Lizeth García Peña

El año que acaba de terminar, fue para nuestra ciudad convulsiva, llena de sorpresas, en su mayoría no tan gratas, que van desde 400 muertos en el año, hasta golpes bajos a la institución cultural del municipio: el Instituto Municipal de Arte y Cultura (IMAC). Sin embargo, la creatividad de los artistas locales también superó los límites de la ciudad, los cuales trascendieron a lo internacional.

Intentaré hacer un recuento, que de antemano advierto que no será el más completo, pero si trataré de rescatar los más relevante en la ciudad, en cuanto a la cultura se refiere.

El año 2005 empezó para muchos con el pie derecho, tal es el caso de algunos artistas plásticos que viajaron a España para participar en la Feria Internacional de Arte Contemporáneo, ARCO 05, en donde fueron presentados en la sección “Tijuana Sessions”, tal como se tituló el primer disco del colectivo Nortec. Los artistas invitados se destacan Tania Candiani, Julio Orozco, Gerardo Yépiz “Acamonchi”, Bulbo, Pepe Mogt, Jorge Nava, Nortec, Radio Global, Jaime Ruiz Otis e Yvonne Venegas, que en lo particular, varios de ellos no debieron ser invitados, pero en fin, ese no fue mi decisión sino de los funcionarios de CONACULTA, que no han podido dignificar su trabajo como impulsores de la cultura mexicana.

Pero también estuvieron los artistas que no fueron invitados oficialmente por la máxima institución cultural mexicana, aquellos que son los protegidos del programa “La Tercera Nación”, planteada por el empresario del grupo Prisa, Antonio Navalón, que por cierto está ligado a escándalos financieros y de corrupción política en su país, España, (según explica Luis Hernández Navarro en www.jornada.unam.mx/2004/10/31/mas-hernandez.html). Este empresario, tal como lo hizo en el 2004 en nuestra ciudad, puso sus mantas con imágenes de artistas tijuanenses sobre un muro en la madre patria, como lo hizo frente al aeropuerto de Tijuana y en el canal de la Zona Río. A los artistas visuales les ha ido de maravilla, cada uno despega de Tijuana al mundo, también ha sido la suerte de cantantes de ópera, músicos, electrónicos y videoastas. Pero a las instituciones culturales les han dado duro.

El caso del IMAC, paramunicipal que ha sido pateada por la administración hankista, ha sido el más escandaloso. Primero, de forma ilegal, nombran director de la “dirección de cultura” a Alejandro Rodríguez, creando la confusión de que desaparecía el IMAC; a la Sra. Elsa Arnáiz se le pide la renuncia un 17 de julio muy soleado, y al día siguiente Rodríguez ya estaba siendo presentado, erróneamente, como el nuevo director de la Dirección de Cultura. Jorge Hank se pasó, por donde más les guste, a la Junta de Gobierno, órgano donde se decide cada movimiento administrativo y presupuestal de la paramunicipal. El escándalo fue inmediato, después se “aclaró” que Rodríguez era el encargado, mientras la Junta decidía ratificarlo o no, que semanas después así se hizo, ya que los candidatos no reunían el perfil para ocupar la dirección de dicha paramunicipal, porque muy poco han tenido que ver con la promoción y difusión cultural, incluso uno de ellos, José Saldaña, es auditor del Grupo Caliente, desde 1989.

Pero no sólo fue el único desajuste que el IMAC tuvo por parte de la administración de Hank, el recorte de personal en el 2005 fue de 22 personas, donde el trabajo de una persona la asume otra, realizando las dos actividades por el mismo sueldo, así como el cierre parcial de bibliotecas y otras de forma definitiva por falta de personal. Ante esto, los miembros ciudadanos de la Junta de Gobierno protestaron ya que cada coordinación tiene bien definido su trabajo, por lo que no se pueden fusionar dos o más coordinaciones, protesta basada en el Reglamento Interno del IMAC.

Otro intento para “amarrar” prácticamente al IMAC, también del Gobierno Municipal en su propuesta de que la Secretaría de Administración y Finanzas maneje los gastos de las paramunicipales, para ahorrar dinero y el sobrante se destine a programas de desarrollo social, con la casualidad de que este 2006 inician las campañas electorales.

Del Instituto de Cultura de Baja California (ICBC) y del Centro Cultural Tijuana (CECUT), no han tenido las grandes quejas, a excepción del ICBC que en la última semana de diciembre, los talleristas del Programa de Educación Artística hicieron un plantón para exigir sus pagos, los cuales tenían, hasta entonces, más de 20 días de retraso, y la suma ascendía a 200 mil pesos, de ahí, nada fuera de los normal en esa institución.

Para el CECUT fue un año que sólo continuó con sus trabajos ya definidos, el único éxito fue el inicio de la Galería Internacional, que según dice su directora, Teresa Vicencio, se terminará entre julio y septiembre de este año.

Sin duda, el 2005 no ha sido el año del XVIII Ayuntamiento de Tijuana, para ninguna de sus áreas, y mucho menos para la difusión y promoción cultural de la localidad a través del IMAC. El resto, el ICBC y el CECUT, pasaron casi sin pena ni gloria, por lo menos dieron continuidad a sus programas, casi sin sobresaltos. Pero este año que acaba de terminar fue el año para muchos artistas, entre escritores, plásticos, músicos y cantantes que, de manera independiente, han logrado sobresalir a nivel nacional e internacional.

De la República de Weimar al Yépez de Tijuana

Por Bernardo de Jesús Saldaña Téllez


Son muertes por ejecución, son cárceles repletas de gente en proceso de sentencia, cautiverio en diversas expresiones físicas o mentales, de conciencia y corporal, hombres jóvenes metidos en la delincuencia como la única alternativa que les ha dado la sociedad y el tiempo en que viven, los valores en la transmutación que genera el dinamismo de mercado, mujeres pubertas que crecen de manera silvestre en la urbanidad, con poca comunicación directa de sus padres, trabajadores migrantes que ante la pobreza han abandonado sus lugares de origen con la esperanza de pasar la frontera y lograr una mejor condición de vida, la frustración, los nuevos asentamientos urbanos, una pobreza que prevalece en las gentes que por propiedad sólo tienen su trabajo y la prole, que contrasta con el nivel de vida de quienes de manera indistinta desempeñan una función comercial o laboral del otro lado de la línea y de este lado, y que hacen la otra Tijuana, la otra sociedad, no menos dramática ni ajena a la condición humana.

La violencia familiar, la prostitución por oficio, el mercado de enervantes que únicamente marca clases sociales ante la preferencia y ante el consumo del tipo de drogas, la sexualidad sin más rienda de control que el cansancio, matrimonios rotos y empalmados, una nueva estructura social de la familia, una arquitectura citadina improvisada, en partes complementarias que siempre demandan mas piezas, propensa al deslave, a la corrupción, a la fragilidad e improvisación sobre las que han construido la convención social, la responsabilidad y la ausencia de ella, el modelo urbano, la paradoja de la globalización, similar a los valores industrializados de una ciudad moderna, una realidad postmoderna, realista y no realista, en transformación constante, inevitable y a su encuentro, Tijuana.

Y luego sus instituciones, sus universidades, sus bares y cantinas, sus mujeres famosas, sus catedrales y capillas, sus distintas expresiones de fe en tantas denominaciones como el producto pueda ser representado y presentado como la medicina a una enfermedad del alma, del corazón, de la fe y de la sociedad, sus maquiladoras, sus políticos, sus poetas, sus escritores, sus artistas, su música y sus ritos, sus sacerdotes, sus fronteras, sus sindicatos, sus mafias y sus libertades, sus encabezados de periódico, sus filósofos que todo hacen, menos evocar los valores que deben o pudieran prevalecer en el ser humano en su actuar cotidiano, en el área de lo privado y de lo público, sus monumentaciones, sus vías, sus causes de agua, sus ríos de gente y la condición humana que bajo los principios de la ética y la moral, la verdadera naturaleza humana siempre está presente como animal destructor y que es necesario dominarlo, el debate ético y moral, trascender el materialismo histórico, definición precisa, exigente de la definición en los tiempos modernos, el conocimiento cognitivo, moral y práctico, la precisión del eje conductor del proceso de hominización, el hombre como especie diferente al animal, el valor de la vida y la dignidad, la capacidad de asombro, el surgimiento weberiano de lo subjetivo en la sociología de la religión industrial; La ética protestante y el espíritu del capitalismo. Pero ¿y las ejecuciones? ¿Y el divorcio? ¿Y sí el ser humano en vez de animal es cosa desechada o reciclada? Su inocencia. En Tijuana el primer valor radica en la mujer, sigue siendo fertilidad y esperanza, pero no queda exenta de los vendavales del destino, sólo si es estoica puede mantener la integridad física y moral. Luego el sentido hedonista como segundo valor fronterizo, el placer picúreo. Le sigue el texto vano, como cola de gallina, sin esencia; la física social complementa un devenir que no evita la deriva cotidiana en sus habitantes, ni la angustia de la emoción, ni de la pena.

Por adorno los filósofos huecos, por banalidad la tercera nación, por ofensa a la razón kantiana los argumentos de cartón, sin visión y sin sentido, sin calidad moral, enardecidos en sus sentidos, engañados dentro de su propia ignorancia y la oscuridad que reflejan, enarbolando la antorcha de la verdad ciega. Solo compiten contra los políticos de cualquier partido, contra los que representan partidos democráticos como si fueran concesiones familiares, contra los que en el nombre de la revolución y de las instituciones endosan toda libertad y preservan viejos regímenes ya extintos, ya muertos vivientes en la vitalidad, activis mortis, contra aquellos que en el nombre del cambio únicamente quisieron disfrutar de los placeres del poder, nunca para ejercer los valores éticos y morales, la ideología que les dio origen radica en la condición humana.
Resumen social: Muertes violentas, perdida de la condición de asombro en el ser humano, devaluación del sentido de dignidad hasta casi desaparecer, salvo en aquellos casos en que algunos individuos dan síntomas de enojo cuando no se cumple su voluntad, o no se les entrega lo que se les pide a cambio, entonces se expresa en cólera, en retiro, pero no por dignidad, sino por frustración. Los hechos sociales externos y coercitivos, la escuela francesa durkheimniana, lo social se explica por lo social, la ignorancia se explica por lo ignorante, por su cultura institucional, se intenta insertar a fuerza, contra la voluntad social, el racionalismo contra el relativismo, domina el relativismo estuardista del hombre utilitarista, el relativismo engulle en sus entrañas la más pura de las ideas, la más perfecta figura ergonómica de ideal racional. Los consejos cicerónicos, ignorado el ideal romano de justicia para el buen gobierno de una provincia, su aplicación trasladada al ámbito de la religión en una transfiguración de la sociedad.

Es retomar el sentido filosófico de la ética y la moral con respecto al ser humano, sobre su condición natural, sobre el origen y teoría del Estado, sobre la convención que propicia a la familia y a la sociedad en que vivimos. Cuestionar si el ser humano es por naturaleza malo o bueno, desde una perspectiva distinta a la maniquea, con valores del relativismo moral de una sociedad en tránsito y desde el supuesto, que la violencia es el estado natural del individuo, entonces las teorías del Estado, la validación hobbsciana para levantar al Estado en un Leviatán, en Estado de derecho que aplique la ley con riguroso sentido, que castigue con fuerza, con más interés en la disciplina para garantizar la paz y la convivencia social, antes que justificar la impunidad, la corrupción, el crimen y el deterioro del tejido social como consecuencia de la sociedad posmoderna donde los dioses quedan postergados y después olvidados ante la globalización de las marcas, la fe como icono, la fe en competencia de mercado. Son válidas otras categorías de análisis, se puede sustituir el prisma maniqueo para reflexionar sobre la moral de lo bueno y lo malo, la dialéctica es válida en reemplazo, también se puede eliminar lo bueno y lo malo, y abordar lo feo y lo bonito, lo placentero y lo frustrante, desde la visión que más nos plazca, la moral provisional desde una espalda erguida y la vista al horizonte, con una actitud que peca de soberbia, estoica. Si los filósofos están perdidos en el glamour, en el apostolado, en la redacción, en ocupar los recintos que pudieran ser equivalentes al oráculo para ostentarse como los modernos escribas, conducta que comparten con los políticos, con los cronistas, cuando se convierten en los fariseos de la verdad, siendo verdaderos acólitos del diablo. La producción social del conocimiento de Marx y Mannheinm, el argumento que el ser social determina la conciencia, la tesis marxista y su concepción de la falsa conciencia que los identifica, la conformación de una teoría de la ideología como producción social de la falsa conciencia.

Relaciones determinantes entre infraestructura y superestructura, discusión crítica si la inconciencia es producto de la insociedad, del inEstado, de la ausencia misma provocada por el vacío de poder y autoridad institucional de ética y moral. Pero no retoman el sentido de la razón pura, ni de la razón kantiana, ni hegeliana, se mueven en la vida sin coordenadas de X y Y, sin la cartográfica cartesiana, ni siquiera guiados por la fe. Hay algo que no mencioné con respecto a la arquitectura urbana, olvide decir que si bien es cierto que algunas casas están hechas de una forma integral, de un mismo diseño, con materiales que las hacen uniformes, también es cierto que un número mayor de casas están hechas de remiendos, aun en el entendido que el remiendo es consecuencia del uso, del paso del tiempo, es señal del desgaste cotidiano, y sin embargo han nacido nuevas y con parches, en otra expresión minúscula, reducidos los hogares a simples techos para la cama y la mesa. La sociedad tijuanense a pesar de su vigor, de su fuerza y su vitalidad, nació a destiempo, gastada, su sociedad no mantiene los valores salvo como referencia de ornato a otros tiempos, entiendo que pudieran causar molestia mis argumentos, pero sin embargo, si la gente tuviera vivo y vigente el sentido de dignidad, a través de diversas manifestaciones expresaría su rechazo a la condición cultural de los gobiernos y sus gobernantes, de las nuevas fuerzas sociales que tienden a institucionalizarse como el narcotráfico y la economía informal, rechazaría de manera categórica las nuevas formas de relaciones sociales, la expresión iconográfica en lo alto de las paredes, la semántica de sus mensajes que no sean los tradicionalmente aceptados, o en su caso la vanguardia en la comunicación y en el lenguaje con que se expresa nuestro tiempo, nuestra estancia y nuestro tránsito, la validación monodiana(2) que sólo somos tránsito, nunca destino mismo, la Némesis adormecida, mutilada, ocasional y que aun para el azar, alea jacta est.

Hay algo que no mencioné con respecto a la arquitectura urbana, olvide decir que si bien es cierto que algunas casas están hechas de una forma integral, de un mismo diseño, con materiales que las hacen uniformes, también es cierto que un número mayor de casas están hechas de remiendos, aun en el entendido que el remiendo es consecuencia del uso, del paso del tiempo, es señal del desgaste cotidiano, y sin embargo han nacido nuevas y con parches, en otra expresión minúscula, reducidos los hogares a simples techos para la cama y la mesa. La sociedad tijuanense a pesar de su vigor, de su fuerza y su vitalidad, nació a destiempo, gastada, su sociedad no mantiene los valores salvo como referencia de ornato a otros tiempos, entiendo que pudieran causar molestia mis argumentos, pero sin embargo, si la gente tuviera vivo y vigente el sentido de dignidad, a través de diversas manifestaciones expresaría su rechazo a la condición cultural de los gobiernos y sus gobernantes, de las nuevas fuerzas sociales que tienden a institucionalizarse como el narcotráfico y la economía informal, rechazaría de manera categórica las nuevas formas de relaciones sociales, la expresión iconográfica en lo alto de las paredes, la semántica de sus mensajes que no sean los tradicionalmente aceptados, o en su caso la vanguardia en la comunicación y en el lenguaje con que se expresa nuestro tiempo, nuestra estancia y nuestro tránsito, la validación monodiana(2) que sólo somos tránsito, nunca destino mismo, la Némesis adormecida, mutilada, ocasional y que aun para el azar, alea jacta est. Y sin embargo, es puro moralismo burgués, sin sentido, la condición natural del tijuanense es de libertad, es una sociedad en tránsito, donde la vida ya no tiene sentido, el partido político que asuma la responsabilidad del Estado, seguirá contando con seres humanos forjados en la misma realidad social, en la misma cultura, si acaso en la contracultura que la complementa. La existencia del ser humano en Tijuana ha perdido el sentido clásico de la virtud aristotélica, en extinción la moral elitista para el ciudadano civilizado en ética nicomaquea, una nueva Edad Media de ignorancia, summa theologica. Lo práctico y utilitario, la facilidad de creer que el fin es el medio y el medio también es el fin, que la felicidad es lo mismo como vivir bien y obrar bien, que creer que el bien es sinónimo de no hacerlo. En esplendor la gran máxima de moral “seguir la naturaleza”, el ser racional encuentra el mayor bien, aun no pensando, aun postergando el verdadero espíritu de la sociedad y del hombre. Un justo medio, remiso.

Sabiduría para qué, dominio de sí con una pistola humeante en la mano, coraje y justicia, pura retórica barata, si dentro de la fortaleza, la templanza y el pudor, se encuentran liberalidad, magnificencia, magnanimidad, dulzura, veracidad, buen humor, amabilidad y un acentuado horror al mal y a la injusticia. Perdonar la vida lleva todo ello, cuando sale corriendo el condenado por calles oscuras, chocando con objetos oscuros y una caída trágica, cómica, alegra la vida, le da sabor al sacrificio, lo convierte en anécdota que releva la cifra gris, oscura y sangrienta. Dentro de la justicia, el bien natural, el mejor bien común, en Tijuana se vive bien, se muere mejor, el bien común convertido cultura, la política civil y social, en esta última, el mayor bien no escrito, el bien común de la costumbre, el bien libre, ya que el bies escrita constriñe, ata las manos, lega responsabilidades, es correctiva, contractual o comercial, se despacha en los juzgados judiciales o adquiere una etiqueta vindicativa. Por último, la equidad del bien común. Nadie se salva. Y luego los deberes para con Dios, con uno mismo, con el prójimo. La primacía del deber sobre la circunstancia, el deber que resiste la prueba de la temporalidad y de la latitud, el deber universal, valido para todos los tiempos y en todas las tierras. El ideal kantiano, más utópico que moralista ilustrado, el hombre autónomo, la persona humana depositaria, centro de los valores, sobre todo cuando a su nombre se encuentra la cuenta bancaria, el registro público de la propiedad y del comercio donde asentó sus propiedades, la crítica de la razón práctica, siempre como un fin y nunca como un medio. El reino de los fines.

Un reino distinto al reino de Dios, “por el reino entiendo el enlace estructural, sistemático, de distintos seres racionales por leyes comunes, más como las leyes determinan los fines, según su valides universal” y no mayor ley que la costumbre. El hombre es santo a pesar de lo que haga.

La intrusión en los asuntos políticos, sociales, históricos y culturales, el quehacer humano como fin en sí, dejando correr el continuo permanente, el valor capital cognoscitivo como razón, nunca como dogma para explicar las ideas y el valor de ellas cuando quedan como hechos, como vestigio antropológico, la conciencia desenmascadora a través de la reconstrucción de la ciencia, el lenguaje pero plasmado en nuevas figuras taquigráficas de azotea, puro y formal, renacentista, la aportación de Wittgenstein para fundar la filosofía analítica, las investigaciones filosóficas para abordar en canal, adentrándose a las entrañas de la violencia social, directo a las tripas del orden establecido, violencia subversiva.

Esos intentos alemanes por tejer y deshilar la razón, la ciencia, la luz del conocimiento, illuminatis, la República de Weimar dentro de un ambiente cultural propio de la revitalización, de la reinvención y del pensamiento, cogito ergo sum. La Alemania de la Unificación y de la República de Weimar, sin duda el país más culto, sabio y erudito del mundo occidental, el escenario de uno de los más profundos procesos de ideologización y polarización social conocidos, transformando la vieja sociedad de la risueña burguesía protestante en un infierno de incomprensión y prejuicios, después el fracaso de Bismarck, la caída de la ansiada República de Weimar, la polarización política de los alemanes, diametralmente opuestos, la más terrible de las incertidumbres, el encuentro, el rumbo de la razón y los intentos de superación para traspasar la condición humana, a costa de la ideología del súper hombre, de la supremacía de la raza, de distintos géneros humanos, éticas y sentires, frontera, operación guardián, mexicanos y gringos, Tijuana choque de valores.

Nuevamente el filósofo por carta colombina, por título otorgado en condición fanática, en apóstol
de la ética del fanatismo, congregados ante la ignorante inmaculada, en taller que reedifica la práctica literaria, el estilo apolíneo, perfecto uso de la gramática, punto, coma, suspenso, ojo abierto, listo a evitar la cacofonía, sin embargo sin gracia, sin contenido, nuevamente filósofos de cartón, y además un sequito que legitima, que se apropian de las verdades de la falsa conciencia, con facultades por ellos mismo atribuidos para validar o invalidar cualquier otra expresión o interpretación de la vida. Los intelectuales no requieren de formulismos ni convencionalismos para cuestionarse sobre su realidad y la sociedad de su tiempo.

La moral Mannheinmiana, el caso particular de la intelligentsia como la unifica, forma que propicia el renacimiento social, por ser incorruptible y por estar exenta de la formación ideológica como producto social, el problema epistemológico planteado de otra manera. “La afectación social no implica necesariamente un error, solo establece el alcance y extensión de su validez”.

1. Friedrich Nietzche, Más allá del bien y del mal. Hay un momento en toda filosofía en que entra en escena la “convicción” del filósofo o, por decirlo con las palabras, de un antiguo “misterio.” Ha llegado un asno hermoso y fuerte.
2. Jacques Monod (Bioquímico francés), El azar y la necesidad. Premio Nóbel de Fisiología y Medicina en 1965. Entre sus obras destaca.